SYSTEM es una compañía fundada por Yasmin Iriel Frione en 2020 junto a un grupo de intérpretes comprometidos con la exploración física y escénica. Con sede inicialmente en Buenos Aires, ha presentado sus obras en festivales y teatros de la ciudad, varias provincias del país y países vecinos. Ha sido compañía residente en distintas asociaciones culturales, consolidando un recorrido artístico sólido gracias a apoyos estatales (Prodanza, Fondo Nacional de las Artes, INT) y presentándose en espacios como CCK, Tecnópolis y otros anfiteatros. Entre sus trabajos más destacados se encuentra la trilogía Sistemas de Fuga, que giró en múltiples ocasiones, así como los solos Intro Visión y Retro Visión. Actualmente, SYSTEM traslada su base a Europa, iniciando residencias y desarrollando una nueva obra, Ecce Femme, con gira prevista para 2026. SYSTEM desarrolla una investigación escénica que fusiona danza contemporánea, acrobacia, trabajo de partner, teatro físico y otros elementos performáticos. Sus intérpretes incluyen bailarines, acrobátas, actores, cantantes y artistas de distintas disciplinas, explorando nuevas formas de movimiento y relación escénica. El eje conceptual que une todas sus piezas es la desterritorialización del cuerpo: escapar de patrones sociales y culturales preestablecidos para encontrar nuevas formas de reterritorialización. Las obras combinan distintos lenguajes escénicos —danza, teatro físico, circo y performance— generando un cruce interdisciplinar. Además, traen a la escena críticas reflexivas sobre el panorama artístico-cultural contemporáneo, invitando a repensar prioridades, valores y modos de producción dentro del mundo del arte. Las obras juegan con la delgada línea entre lo que sucede dentro y fuera de la escena, construyendo experiencias placenteras y potenciando la conexión entre intérpretes y público.
Un creador solitario, atrapado en la madrugada, lucha contra el cansancio y los efectos del alcohol. Una presencia imposible de olvidar lo persigue obsesivamente en sus pensamientos. Decide dibujarla, escribirla, colgarla junto a sus otros trabajos… Entre trazos, palabras y movimientos, la ficción se encarna frente a sus ojos. La figura cobra vida.
Lo que sigue es un juego entre creador y criatura, entre control y libertad, donde las fronteras se vuelven difusas. Lo que parecía una historia inventada se transforma en un encuentro real. Finalmente, descubrimos que la mente que todo lo imagina es otra: estamos dentro de la mente de ella, en un ensayo de su creación.
Ecce Femme combina acrobacia, danza contemporánea y teatro físico para explorar los límites entre ficción y realidad, entre creer y crear, entre lo que imaginamos y lo que hacemos existir.
La idea de la trilogía Sistemas de Fuga nace en Europa en 2019, donde se producen los primeros 13 minutos de la primera obra, seleccionada por el festival Cartes Blanches del Ballet Junior de Genève. La trilogía parte de la hipótesis de que los desafíos contemporáneos —ecológicos, sociales, políticos y culturales— están profundamente interconectados. Frente a la vorágine cotidiana, las obras proponen la búsqueda de fugas: espacios, movimientos y universos que permitan respirar, cuestionar y reconectar con lo esencial. La relación entre la mente humana y las máquinas, cada vez más simbiótica, atraviesa la propuesta, explorando la fuga como acto de resistencia, creatividad y convivencia.
Se desarrolla en tres momentos: la vorágine previa a la pandemia, el confinamiento introspectivo, y el reencuentro posterior. La obra explora la alienación provocada por la sobreproducción y la búsqueda de eficiencia casi maquínica, mostrando la polaridad entre el estado “humano” y el “maquínico”. La escena propone un universo de fugas frente al caos planetario, generando un acto de potencia disruptiva a través del movimiento colectivo.
Surge a finales de 2021, después de numerosas funciones de la primera obra. Mientras la primera edición representaba la energía intensa del reencuentro post-pandemia, la segunda se basa en el elemento agua, reflejando mayor sensibilidad y atención a los vínculos. La obra se inspira en las transformaciones sociales y afectivas post-pandemia: nuevos modos de auto-percibirse, sostiene el concepto de una realidad más líquida en la apertura a nuevas formas de vincularse y de conectar con los otros y el entorno.
Los intérpretes canalizan conflictos, contradicciones y vaivenes a través del movimiento y la música en vivo, involucrando al público activamente: pueden rodear la escena 360° e incluso ingresar al espacio escénico. La edición incorpora elementos multisensoriales —aromas, texturas, colores, sabores— creando una experiencia inmersiva que combina ciencia, tecnología y la singularidad del cuerpo en escena.
Propone un viaje en busca de sentido y conexión, evidenciando cómo la sobrecarga sensorial nos empuja a refugiarnos en realidades alternativas. La obra explora la vincularidad y lo esencial de la vida contemporánea, incorporando trabajo de partner de más de dos intérpretes en simultáneo para construir un concepto de red inspirado en la realidad rizomática de Deleuze y Guattari: una estructura interconectada, descentralizada y multiplicadora, donde cualquier punto puede conectarse con otro sin jerarquías. El elemento central de esta obra es la Tierra.